miércoles, 25 de septiembre de 2013

Cosas veredes


PUBLICADO EN LA VERDAD EL MARTES 24 DE SEPTIEMBRE DE 2013

Loca me tiene el wassap, loca. Total, para abrirlo y que me pregunten si estoy viendo “¿Quién quiere casarse con mi hijo?”, o para que me avisen de que Tamara Falcó va a hacer un reality. No sé, pero empiezo a pensar que proyecto una imagen demasiado frívola. En cambio, el viernes me llegó un mensaje diciendo “A las 16:00 h, comunicado urgente Casa Real”. Y claro, me dio un parraque. No porque tuviera que salir disparada hacia Madrid para cubrir la noticia, ni comenzar a llamar a mis fuentes para ver de qué podía ir la cosa (mis fuentes se reducen a mi carnicero, que me casca todo lo que pasa en el barrio mientras me pone mitad de cuarto de jamón york, pero dudo que tenga hilo directo con Zarzuela), sino porque volvían a saltar las alarmas de una posible abdicación. O eso, o el anuncio del matrimonio de mi hijo con la infanta Leonor. Y todavía es un poco pronto para hablar del tema, la verdad. 

Pero la abdicación a nosotros tampoco nos pillaría de nuevas. No habremos visto atacar naves en llamas más allá de Orión, ni los rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser, pero sí cosas peores: la combinación del negro con el azul marino, las comparecencias políticas a través de un plasma, la separación de Matías Prats tras 28 años de matrimonio, el desmantelamiento de los servicios públicos, el aumento de las desigualdades, Lucía Etxebarria en “Campamento de verano” y el poli De Luxe de la madre de Campanario. Y todo eso curte. Tampoco creímos nunca que viviríamos para ver renunciar a un Papa, ni para oír a su sucesor decir las cosas que ha dicho, y fíjense. Pero menos aún pensamos que asistiríamos a la bendición de los cupcakes vía Tamara Falcó, que cualquier día se le aparece la Virgen en la crema de mantequilla y acaba montando una ermita en Puerta de Hierro en honor a Santa María Magdalena de la Cobertura Glaseada. Cosas veredes que farán fablar las piedras.

Y, al final, todo el lío era por una operación de cadera. Pobre rey nuestro, que con tanta prótesis el pobre ya parece Robocop. En fin, le deseo que se recupere pronto y que vuelva a la carga. O que no vuelva, si no quiere. Si pa los pocos euros que vemos, qué más nos da que lleven un perfil u otro.

1 comentario:

Hong Kong Blues dijo...

Entiendo el pálpito que se llevaría. Normal. Aunque me preocupa el nivel al que están llegando las noticias que le llegan. Afortunadamente usted siempre se las ingenia para iluminar las penumbras culturales de este país. Y encima con humor.
La adoro.